No estoy de acuerdo con tu dialogo soso y tus argumentos poco consistentes. Tampoco con el sinfín de temas de lo más insulsos que terminas proponiendo al intentar entablar una conversación. Todo aquello que se avecina a tu cabeza ya ha sido dicho por algún otro ignorante y ya ha sido escuchado, seguramente, más de una vez por mí en un intento de poner a prueba mi propia tolerancia.
Así que no creas que esto es algo extraordinario. No creas que me impresiona tu criterio y razonamiento, porque no es así.
Debido a tu incapacidad para entender del todo una oración te explico lo siguiente: te saludo, te hablo y por qué no? me agradas; pero no esperes, por favor, que dirija mi conducta hacia la misma estupidez en la que decides sumergirte tú, ya sea porque realmente no lo notas o por simple vocación.
Exactamente eso le diria yo a un tipo con el que acepte salir un par de veces, intentandome convencer que no todo puede ser tan malo; gracias a la aterradora frustración de la supuesta vida estructurada y placenteraque llevo :-D
ResponderEliminarme gusto!
jaja entiendo a qué te refieres. Supongo que lo ideal es no dejar que el temor a una posible monotonía por la rutina individual nos invada; creo que tampoco es justo para uno mismo [y para un otro] el tener que forzar actitudes o ssentimientos que en verdad no se dan naturalmente, es incómodo. Sobretodo si es que en algún momento el otro termina por involucrarse realmente :/
ResponderEliminarEn fin, gracias por leer :)